MODELO - CIUDAD DE QUITO
El llegar a concebir y madurar la idea de construir la Maqueta de Quito Colonial tuvo un largo proceso.
En el año de 1963 Guido Falcony viajó a los Estados Unidos en donde permaneció 15 años, durante los cuales estudió arte, pintura, diseño gráfico, publicidad, fotografía y cinematografía.
En el año de 1964 hubo una Feria Mundial en Nueva York, en donde se exhibía la maqueta de esta ciudad, la cual fue construida por 300 artistas a lo largo de 4 años. Ello le motivó para construir algún día la Maqueta de Quito Colonial.
En el año 1977 regresó a vivir en Quito y luego en 1978, la Unesco nombró a la ciudad como el Primer Patrimonio Cultural de la Humanidad en el mundo, un orgullo nacional para todos los ecuatorianos. Luego vino a su mente la realidad de su vida, construir su mejor sueño, el Centro Histórico de Quito en miniatura.
La construcción de la maqueta de una ciudad colonial es muy complicada puesto que no existe información precisa de su estructura arquitectónica, siendo necesario crear un sistema práctico para reproducir las características propias de cada casa y demás elementos arquitectónicos. Para el efecto, decidió fotografiar casa por casa para poder dibujar, pintar y reproducir todos sus detalles sobre un cartón especial y recortarlos para pegarlos sobre una caja de madera, la cual mantenía las particularidades topográficas de cada manzana e instalar un sistema eléctrico para colocar focos y transformadores de 12 voltios con el fin de imitar el anochecer, manzana por manzana, dando un total de 110 manzanas. Este Quito en Miniatura mide aproximadamente 40 metros cuadrados y está hecha a escala 1:200.
Todo este trabajo se realizó a lo largo de 8 años en un inicio, lo que cubría el límite más antiguo de la ciudad. Sin embargo ha continuado construyendo más de 10 manzanas, las cuales se encuentran en bodega hasta que sea posible ampliar su salón de exhibición.
La exhibición está acompañada de una explicación clara y precisa sobre las características arquitectónicas e históricas de la ciudad, con un fondo de nuestra música quiteña. La visita a este museo es única y diferente, puesto que la construcción de la maqueta, desde su inicio, ha sido pensada y planificada en forma muy profunda para que los visitantes, niños y adultos, nacionales y extranjeros salgan felices y satisfechos de conocer meticulosamente nuestro maravilloso "Centro Histórico".
